2023 · 01 · 19

El periódico israelí Haaretz desmiente y ridiculiza la ‘absurda’ versión del ejercito israelí de ocupación sobre el asesinato del palestino Ahmad Kahla

El ejército israelí de ocupación miente para justificar sus crímenes. La propia prensa hebrea y organizaciones israelíes de derechos humanos revelan y descalifican estas burdas mentiras. No obstante, llama la atención como la prensa occidental, principalmente aquella ligada a la OTAN, repite a ciegas las versiones israelíes a pesar de las reiteradas falsedades y casi nunca se informa sobre las investigaciones serias que desmienten las versiones oficiales de Israel.

Un reportaje del diario hebreo Haaretz de este viernes 20-01-2023, destacó la ejecución a sangre fría del palestino Ahmad Kahla de 45 años del pueblo de Ramon, al este de Ramallah. Los soldados de ocupación mataron a Kahla el día 15 de este mes, bajo el puente de Yabroud, al este de Ramallah. Le dispararon desde distancia cero.

Según el diario, el ejército de ocupación cambió la versión que dio su vocero al inicio del evento cuando aseguró que Kahla amenazó a los soldados con un cuchillo, antes de afirmar en otra versión que intentó apoderarse del arma de uno de ellos. La versión cambiante de los soldados fue refutada por Qusai, hijo mayor del Ahmad y los numerosos testigos presentes.

El periódico israelí dice en su informe que, al principio, el ejército israelí afirmó que Ahmad Kahla arrojó piedras a los soldados y se acercó a ellos mientras sacaba un cuchillo.  Sin embargo y ante esta absurda versión y la evidencia de un video difundido, rápidamente cambió su versión descabellada, y presentó una nueva acusación en contra del asesinado. Esta vez de “intentar apoderarse del arma” de uno de los soldados, pero no aportó pruebas de ello, no hubo pruebas de un cuchillo o piedra y menos el supuesto intento del apoderamiento de arma. Todo fue mentira tras mentira para justificar este nuevo asesinato.

Ahmad Kahla y su hijo Qusai trabajan en el rubro de la construcción. Los hechos sucedieron mientras ambos se dirigían al trabajo. Su coche estaba en un convoy de vehículos que esperaban para pasar por el puesto de control militar de Yabroud, cuando los soldados israelíes detuvieron deliberadamente el tráfico por largo tiempo, lo que provocó que los palestinos en sus vehículos hicieran sonar las bocinas en protesta por las acciones de los soldados. Según el testimonio de Qusai hijo de Ahmad Kahla, los soldados dispararon una granada aturdidora en contra de su vehículo, lo que provocó que su padre les gritara, antes de que los soldados los rodearan y uno de ellos rociara gas pimienta contra el propio Qusai y lo sacaran a la fuerza del vehículo mientras le ardían los ojos, lo alejaron unos metros del vehículo y lo tiraron violentamente al costado de la carretera, hasta que su padre enojado salió tratando de evitar que se llevaran a su hijo. En ese momento, los soldados pusieron a Qusay acostado boca abajo y le ordenaron que se pusiera las manos detrás de la espalda. Qusai que no podía ver nada por el gas, de repente escuchó disparos, y luego, poco tiempo después, escuchó el sonido de una ambulancia, y los gritos de los conductores de los vehículos en la zona. Numerosos testigos le dijeron a la familia del asesinado que el padre Kahla, salió de su vehículo gritando desesperadamente por la seguridad de su hijo después de que los soldados lo rociaron con gas pimienta y lo empujaron, luego uno de los soldados, sin motivo alguno, se acercó al padre y disparó desde muy corta distancia. Le dieron dos balazos, uno de ellos en el cuello, y cayó sangrando. Falleció en el lugar. Luego los soldados subieron al jeep y abandonaron el sitio después de matarlo a sangre fría. Una ambulancia palestina llegó y se llevó a Ahmad ya fallecido.

El diario israelí dice que "La imagen del cadáver en la carretera, la sangre brotando del cuello de Kahla, la ropa de trabajo empapada con sangre, el tubo de plástico metido en la boca y el cuello con un trozo de tela en un desesperado intento por salvarle la vida", ¡es horrible! Fue un macabro shock para todos los presentes por igual y en especial para su familia.

“El testimonio de su hijo, conductores y pasajeros de los vehículos presentes, parecían más confiables que las declaraciones cambiantes del ejército”, señaló el diario.

Cabe recordar que casi siempre el ejército israelí de ocupación presenta declaraciones falsas para justificar y avalar los asesinatos en incluso de los niños disparados por los soldados.

Recientemente, la organización israelí de derechos humanos B’tselem reveló las mentiras de los generales israelíes sobre el asesinato de palestinos, presentando el caso del joven Raed Naasan de 21 años del pueblo de Al-Mughayer. Los soldados le dispararon y lo mataron mientras intentaba escapar sin representar un peligro para nadie. Más tarde, el ejército mintió y afirmó que Raed había lanzado un cóctel Molotov. La investigación de B'Tselem, la documentación y videos prueban otros hechos.

El ejército de ocupación, como de costumbre, justifica las matanzas alegando supuestos intentos de acuchillar, de lanzar piedras, de arrojar cócteles de molotov contra los “pacíficos e inocentes soldados”, etc. Ellos mienten sabiendo que mienten. Las investigaciones serias casi siempre desmienten las versiones del ejército de ocupación.

Fuente: Corresponsal de PalestinaLibre.org en Jerusalén ocupada